Si eres amante del chocolate y los postres cremosos, el Príncipe Alberto te conquistará desde el primer bocado. Descubre su historia, aprende a prepararlo paso a paso y sorprende a todos con esta joya de la repostería canaria.

Si te gusta el postre Príncipe Alberto, seguro que te encantará probar otros postres canarios igual de deliciosos. Uno de los más tradicionales es el bienmesabe canario, una crema dulce a base de almendras, miel y yema de huevo, perfecta para acompañar helados o servir con bizcochos.
Además, en nuestra selección de postres típicos de Canarias encontrarás otras recetas irresistibles que reflejan la riqueza gastronómica del archipiélago. ¡Descúbrelas y endulza tu mesa con el auténtico sabor canario!
Receta del postre canario Príncipe Alberto
Plato: postreCocina: canaria, españolaDificultad: media6
porciones30
minutos10
minutos500
kcal240
minutos180
gramos14,00
€4
horas40
minutosLa primera vez que probé el Príncipe Alberto no fue en una pastelería famosa, fue en la cocina de un amigo después de una cena entre colegas. No sé si fue la textura cremosa del chocolate o el contraste con las almendras y las avellanas lo que me atrapó, pero desde el primer bocado supe que este postre tenía algo especial.
Este delicioso postre es uno de los más emblemáticos de La Palma, una de las islas Canarias, y aunque no es tan conocido fuera del archipiélago, quienes lo prueban quedan rendidos ante su mezcla de chocolate, frutos secos y bizcocho. Su nombre es tan regio como su sabor: cuenta la historia que fue creado por Doña Matilde Arroyo, una repostera palmera que con su receta se ganó un lugar en la tradición gastronómica de la isla.
Si te gusta el chocolate en postres cremosos, esta receta te va a enamorar. Y lo mejor es que, aunque tiene su truco, con algunos consejos (y evitando ciertos errores que yo mismo cometí al intentarlo por primera vez), puedes lograr una versión perfecta.
Ingredientes para hacer Príncipe Alberto
150 g de mantequilla (a temperatura ambiente)
150 g de azúcar
4 huevos (separadas las yemas de las claras)
200 g de chocolate negro de buena calidad
100 g de almendras
100 g de avellanas
1 paquete de bizcochos de soletilla
1 taza de café cargado (endulzado al gusto)
Paso a paso para hacer el postre palmero Príncipe Alberto
- Batir la mantequilla y el azúcar
Comienzo batiendo la mantequilla, que debe estar a temperatura ambiente para que tenga una textura cremosa. Una vez está bien trabajada, añado el azúcar y sigo batiendo hasta conseguir una mezcla homogénea y aireada. Luego incorporo las yemas de huevo una a una, batiendo bien después de cada adición para que la mezcla quede integrada y esponjosa. - Fundir el chocolate
Aparte, derrito el chocolate al baño maría hasta que quede completamente líquido y sin grumos. Lo dejo templar unos minutos antes de incorporarlo a la mezcla de mantequilla, azúcar y yemas. Remuevo bien hasta que la mezcla se vuelva uniforme y brillante. - Montar las claras a punto de nieve
En otro bol, bato las claras hasta que alcanzan el punto de nieve. Este paso es clave para darle ligereza a la crema de chocolate. - Tostar y moler los frutos secos
Tuesto las almendras y las avellanas en una sartén hasta que desprendan su aroma. Luego las dejo enfriar y las trituro, asegurándome de que queden con una textura fina pero con pequeños trozos que aporten un toque crujiente. - Integrar los ingredientes
Incorporo las claras montadas a la mezcla de chocolate con movimientos envolventes para que no pierdan volumen. Luego añado los frutos secos molidos y mezclo con suavidad. - Mojar los bizcochos en café y montar el postre
Preparo una taza de café fuerte y endulzo al gusto. Paso rápidamente los bizcochos de soletilla por el café, evitando que se empapen demasiado. Después monto el postre en capas.
En un molde o en copas individuales, coloco una capa de bizcochos mojados en café y encima una capa generosa de la crema de chocolate. Repito el proceso haciendo varias capas, terminando con la crema en la parte superior. - Reposo y presentación
Dejo reposar en la nevera durante al menos 4 horas, aunque lo ideal es hacerlo de un día para otro para que los sabores se integren bien.
Notas y errores a tener en cuenta
- La calidad del chocolate importa: Usa uno con buen porcentaje de cacao, mínimo 70%.
- Cuidado con la mantequilla: Si te pasas, el postre queda graso; si pones poca, queda seco.
- No batas demasiado las claras: El secreto de la textura está en incorporarlas con movimientos envolventes.
- Refrigera bien: Aunque la tentación de comerlo antes es fuerte, las horas de frío ayudan a que los sabores se asienten.
- Aprendí estos detalles después de varios intentos fallidos, pero créeme: cuando das con la receta perfecta, vale totalmente la pena.
El origen del Príncipe Alberto: historia de un postre canario
Este postre típico de Canarias no es solo exquisito, sino también una parte importante de la repostería tradicional de La Palma. La receta del Príncipe Alberto se atribuye a Doña Matilde Arroyo, una repostera palmera cuya receta se ha transmitido de generación en generación, convirtiéndose en un símbolo gastronómico de la isla. Recomendamos ver esta entrevista a dos hijas de doña Matilde Arroyo.
Un dulce con un origen familiar
Según la tradición oral, Doña Matilde elaboró este postre en su cocina, combinando ingredientes sencillos como chocolate, almendras, avellanas y bizcochos para crear una crema aterciopelada y llena de sabor. Aunque se ha especulado sobre la posibilidad de que el nombre estuviera inspirado en algún príncipe europeo, no hay evidencia histórica que confirme esta teoría. Más bien, parece que fue una elección personal de la creadora.
De una receta casera a un emblema de La Palma
Lo que comenzó como una receta casera pronto se popularizó en toda la isla. La textura cremosa del Príncipe Alberto, su intenso sabor a chocolate y el toque crujiente de los frutos secos conquistaron los paladares de quienes lo probaban, convirtiéndolo en un postre imprescindible en celebraciones familiares.
Hoy en día, este postre sigue siendo un símbolo de la dulcería palmera. Su preparación ha mantenido la esencia original, aunque algunas versiones incluyen ligeras variaciones en los ingredientes o en la presentación. Lo que no cambia es su capacidad de sorprender y enamorar a los amantes del chocolate.
Si alguna vez visitas La Palma, probar un auténtico Príncipe Alberto es una experiencia que no te puedes perder.
Variaciones del Príncipe Alberto

Aunque la receta tradicional se ha mantenido casi intacta desde su creación, algunos reposteros y aficionados han experimentado con ingredientes y técnicas para darle un toque personal. A continuación, te presentamos algunas variaciones interesantes que mantienen la esencia del postre, pero con ligeros giros que pueden sorprender a los amantes del chocolate.
Sin frutos secos, pero igual de delicioso
Uno de los ingredientes clave son las almendras y avellanas, que aportan textura y un sabor inconfundible. Sin embargo, para quienes tienen alergias o simplemente prefieren una versión más suave, es posible eliminarlos sin que el postre pierda su esencia.
- Sustitución recomendada: En lugar de frutos secos molidos, puedes agregar un poco más de bizcocho desmenuzado o incluso una cucharada extra de cacao en polvo para intensificar el sabor del chocolate.
Más cremoso con un toque de nata
La receta original consigue su textura aterciopelada gracias a la combinación de mantequilla, huevos y chocolate. Sin embargo, algunas versiones incluyen un poco de nata montada para hacer la crema aún más ligera y aireada.
- Consejo: Si decides añadir nata, hazlo al final, mezclándola con movimientos envolventes para evitar que la mezcla pierda esponjosidad.
Un giro con licor para los más atrevidos
Algunas personas optan por aromatizar el postre con un toque de licor, dándole una dimensión extra de sabor. Entre las opciones más populares están el ron, licor de avellana o licor de café, que combinan perfectamente con el chocolate.
- Importante: Si decides incorporar licor, agrégalo con moderación y solo unas gotas para que no domine el sabor del chocolate.
Versión más ligera: menos mantequilla, más cacao
Para quienes buscan una alternativa menos calórica sin renunciar al sabor intenso del chocolate, se puede reducir la cantidad de mantequilla y aumentar el contenido de cacao. El resultado es una versión con menos grasa, pero con un sabor más pronunciado a chocolate negro.
Aunque la versión clásica sigue siendo la favorita de muchos, estas variaciones demuestran que el Príncipe Alberto es un postre versátil que se puede adaptar a diferentes gustos y necesidades. Lo más importante es disfrutarlo y experimentar hasta encontrar tu versión perfecta.
Preguntas frecuentes sobre el postre Príncipe Alberto de La Palma
El nombre del Príncipe Alberto proviene de una curiosa anécdota. Se dice que una repostera palmera creó este postre en honor al príncipe Alberto de Bélgica tras su visita a La Palma. Aunque no hay una versión oficial, lo cierto es que este postre se ha convertido en un clásico de la repostería canaria, con su inconfundible mezcla de chocolate, frutos secos y bizcocho empapado en café.
Sí, es posible preparar Príncipe Alberto sin huevo sin perder su textura cremosa. Se puede sustituir por nata montada, leche condensada o incluso una mezcla de mantequilla y chocolate fundido. Estas alternativas permiten mantener la untuosidad característica del postre, sin afectar demasiado su sabor tradicional.
El secreto para un Príncipe Alberto delicioso está en el chocolate. Lo ideal es utilizar chocolate negro con un mínimo del 70% de cacao, ya que aporta un sabor profundo e intenso. Si prefieres una versión más suave, puedes mezclarlo con un poco de chocolate con leche, pero siempre manteniendo un buen equilibrio para que no resulte demasiado dulce.
Sí, se puede usar chocolate con leche en lugar de chocolate negro, pero hay que tener en cuenta que el resultado será más dulce y menos intenso. Para evitar que el postre quede demasiado empalagoso, puedes reducir la cantidad de azúcar en la receta o combinar ambos tipos de chocolate para lograr un equilibrio perfecto.
El café es un ingrediente fundamental en la receta tradicional, ya que realza el sabor del chocolate y equilibra el dulzor. Sin embargo, si no puedes o no quieres usar café, puedes sustituirlo por leche, bebida vegetal o incluso un almíbar ligero. La clave es humedecer los bizcochos sin empaparlos demasiado, para que mantengan su estructura en las capas del postre.
Preparar Príncipe Alberto en Thermomix o con un robot de cocina facilita mucho el proceso. Se pueden triturar los frutos secos y los bizcochos, derretir el chocolate al baño María controlando la temperatura y emulsionar la crema para lograr una textura perfecta. Solo hay que ajustar los tiempos y velocidades según el modelo del robot para que el postre salga impecable.
El Príncipe Alberto es un postre con un sabor profundo y envolvente, por lo que marida muy bien con vinos dulces canarios, como un Moscatel o un Malvasía. También combina perfectamente con un licor de café, un ron miel o incluso un buen espresso si prefieres un contraste más marcado. Para los más golosos, acompañarlo con un chocolate caliente potencia aún más su irresistible sabor, aunque a mí personalmente ya me parece demasiado chocolate.